viernes, 21 de marzo de 2008

Él es la mañana desnuda

Jesús se acostó sobre los edificios
desnudo
y sobre su piel morena
se escurrió el sol
como el aceite de la unción.

Señor,
los niños llegarán de todas partes para verte
grandioso
sobre el mundo.
Dejarán de jugar los juegos tristes.

Los niños
de entre cinco y siete años
se acercarán con la mirada inocente,
te arrancarán la piel con odio
y con sus pequeñas uñas.

En unas ramas secas y grises
alzarán banderas de piel escurriendo grasa
y sangre
y sentirás la mañana
carcomiendo tu carne,
quebrando tus huesos
y borrando tu imagen.

Beberán tu sangre, Cristo.
Los niños comerán tu carne.

2 comentarios:

La Inclusión dijo...

la imagen es encantadora.

Nadie dijo...

Gracias.
En un momento se me vino a la mente y me pareció hermosa.