lunes, 24 de septiembre de 2007

Cuando cae la hoja


Bello.
Altivo.
Feroz.

Un instante le bastó para llevarme con él.
Me tomó en sus brazos,
me tocaba.
Frotaba su malicia en mi cuerpo.

Parece que existen más colores,
que la velocidad deforma las cosas
y las estrellas se mezclan con las flores.

Parece que existen más aromas,
esos que se sueñan,
que se sospechan...

¡Pero no pienso en nada!
Mejor no pienso en nada.
Ahora ya nada importa.
Todo se volvió nostalgia.

Ahora, mejor, abro bien los ojos a los misterios.

Él me guía
en silencio.

--
Producto del "taller" (es más un conversatorio) literario que imparte Ricardo Lindo en la Secretaría de Arte y Cultura de la UES, los jueves de 2:00 p.m. a 4:00 p.m.

2 comentarios:

Orpheo dijo...

Me gusta bastante teniendo en cuenta de qué se trató el ejercicio. Me gusta "Todo se volvió nostalgia.", es muy representativo de lo que tenías que representar (redundancia :S)

Nadie dijo...

JAja! A mi también me gusta.
Son bien interesantes los ejercicios de "taller". Nunca me había enfrentado a escribir en base a una premisa, sólo escribía cuando tenía algo que decir.